Categorías
Mi camino al éxito

Cómo reacciono

Mucha gente me dice que yo siempre estoy bien y contenta, y hoy quiero compartir cómo lo hago, sobre todo, cuando pasan cosas malas.
Aquí me acababan de operar de la rodilla y yo estaba de muy buen humor.

Cuando pasan cosas malas, por ejemplo, cuando me robaron mi bolso con mi cartera, mis llaves, mi móvil y mis documentos, yo me sentí sorprendida y no supe quién me robó esa noche, aún así, yo no me enfadé ni me preocupé; cuando llegué a mi casa y di la mala noticia a mis padres, se sintieron mal pero me dijieron que no pasaba nada además, yo me sentí tranquila en ese momento y como a mí no me pasó nada y estaba pasándolo bien con mis amigos, me lo tomé con mucha paciencia y con calma.

Otro ejemplo en el que yo creo que tengo mala pata es en el no poder conseguir el amor romántico, yo no lo tengo pero me siento tranquila con mi vida privada porque tengo mucho amor de gente que me quiere y porque tengo mucha paciencia y confío en que todo sale siempre bien.

Otra emoción mala es el miedo que hace que sueñe mucho cuando me duermo por la noche y me da un poco de trauma. Eso me pasa cuando veo películas que me dan susto o cuando alguien cuenta alguna historia que no me gusta, yo me siento, en esos momentos, con muchas pesadillas, con mucho miedo y con los pelos en punta y lo que hago para solucionarlo es no ver esas cosas o no escuchar esas historias. Prefiero ver y escuchar otras cosas que me hagan feliz y me pongan contenta.

 

Espero que mis consejos os sirvan para ser tan alegre como yo, me despido con muchos besos para todos como siempre.

Ser feliz es muy fácil, ¡a mí se me da muy bien!

Categorías
Mi camino al éxito

Los días grises

Cuando los proyectos son largos, y duran y duran… (más que las pilas Duracell) es bastante probable que tengas los que yo llamo “días grises”.

Estás erosionado, estás desgastado, te cuesta levantarte, te cuesta hasta acostarte… Y es que los proyectos largos acaban con todas tus fuerzas (y a veces hasta con las ganas de vivir).  Sólo te apetece dormir y dormir, o mandarlo todo a la mierda, gritar y llorar…

 

Siento mucho decirte amigo mío, que no hay mucha cosa que hacer contra esos días grises, después de ese descanso, ese break, ese fin de semana de relax, el elefante de tu proyecto seguirá ahí, esperando a que lo termines.

 

¿Y qué hacemos? ¿Nos rendimos?

 

¡De ninguna manera!

Seguro que has hablado con alguna madre que comentaba que el último mes del embarazo fue el peor, el más inaguantable… que luego el parto que fue terrible, pero que después, todo merece la pena al tener a su bebé en brazos.

¿Sabías que los elefantes pasan 2 años de embarazo?.

 

Por lo tanto, mi consejo es que no desesperes, a veces solo queda apechugar,  y cuando tengas a tu bebé contigo (proyecto, idea, etc.) mirarás atrás y dirás:

Ha merecido la pena.

Al final, siempre sale el sol en los días grises. Si no hoy, al día siguiente.

Categorías
Mi camino al éxito

Mejor prevenir…

… que curar.

Que la actividad física mejora la salud de la población está ya muy demostrado científicamente, aunque social y políticamente aún no esté plenamente reconocido.

Existen diferentes estudios sobre el impacto a nivel de salud y, por ende, sobre el costo sanitario que esto supone a nivel mundial, pero por desgracia se siguen invirtiendo cantidades ingentes de dinero en tratar de solucionar los problemas y muy poco en prevenirlos.

El gasto farmacológico o por asistencia médica es desorbitado y aún así no hemos conseguido reducir los niveles de mortalidad que podrían prevenirse con una mejora en la alimentación y con una adecuada práctica deportiva.

Gran parte de síntomas como los dolores de cabeza, la fatiga, los problemas gastro-intestinales, etc. que surgen sin relación directa con una patología concreta, ocurren como consecuencia de nuestro estilo de vida actual. Y en vez de tratar estos síntomas atacando a la raíz del problema, se intentan buscar soluciones mágicas casi siempre expendidas en una cajita con prospecto.

Por desgracia, existen muchos intereses para que se continúe negociando con algo tan básico como es la salud de las personas, pero parece que no hay límites en un mundo donde la avaricia y la codicia manejan todo a su antojo. Los medios de comunicación, los políticos y las multinacionales más poderosas siguen haciendo creer a la población que evitarán prácticamente cualquier patología asociada a la falta de práctica deportiva y/o a la falta de unos correctos hábitos alimenticios, con recomendaciones absurdas que solamente responden al patrón del beneficio propio y nunca al de la sociedad como conjunto.

Estas recomendaciones solo son un medio para seguir ganando dinero, no existen remedios mágicos ni a corto plazo, si de verdad quieres vivir durante más tiempo y con una mayor calidad, aliméntate mejor, realiza deporte con frecuencia y aléjate de la mayoría de las recomendaciones milagrosas que te dan en tu día a día.

Mantener el cuerpo con buena salud es un deber, de lo contrario no seremos capaces de mantener nuestro cuerpo y mente fuertes y claros.-Buddha.

Categorías
Mi camino al éxito

Compañerismo

Los triatlones por equipos, la auténtica prueba de compañerismo.

Es el momento de dejar de lado los tiempos y centrarse en el trabajo en equipo. No importa qué marca hagas o qué objetivo te propongas, tan solo que eres la parte de un todo y que la suma de las partes llegará más lejos que la forma individual.

Las pruebas por equipos son, en mi opinión, de las mejores y más satisfactorias que te ofrece el triatlón. En ella se sacrifica el talento individual y se apuesta por un objetivo común.

El pasado domingo tuvo lugar la prueba de triatlones por equipos de El Prat, Barcelona.

Era mi segundo año participando y, probablemente, ya sea una cita anual obligatoria. Muchos compañeros de equipo formamos grupos de 4-5 personas para participar y pasarlo en grande. Este año había algo que todavía me motivaba más: mi hermano competiría a mi lado.

Javi ha participado en un par de triatlones y se motiva para entrenar y competir principalmente cuando llega el verano. En esta ocasión, aún siendo 30 de abril, nos sorprendió la lluvia, el frío y, como consecuencia de la climatología, la eliminación del tramo de agua. No era un buen día para competir pero habíamos hablado mucho de esa carrera y yo tenía muy buen recuerdo de la edición pasada. Seríamos el equipo más sonriente de la competición, formado, a diferencia de la mayoría de mixtos, por todo mujeres (5 en concreto) y un único hombre.

No todos conocíamos el nivel del resto del equipo pero tampoco preguntamos. Tiraríamos unos de otros en cada tramo. Nos esforzaríamos en la disciplina que más nos costaba y ayudaríamos a los compañeros en la que fuéramos más fuertes. Ese era el único plan: salir juntos, hacerlo juntos y llegar de la mano.

Fue un día redondo a pesar de los obstáculos. No miramos el reloj y no presionamos a quien se quedaba atrás, le ofrecíamos la mano. Nos vestimos con los colores corporativos del equipo pero no estábamos preparados para congelarnos en la cola de espera para salir a competir (en los triatlones por equipos la salida es por grupos a cada minuto), así que nos pusimos cada uno los complementos que consideramos, siendo éstos de lo más variopintos y con los que finalmente competiríamos hasta el tramo del running donde ya teníamos la temperatura corporal suficientemente alta como para quitárnoslos. Y así es como fuimos el único equipo dominguero, multicolor… que priorizaba el humor a la competición.

Para mí no fue solo un logro colectivo, también supuso un logro individual: compartir con mi hermano una forma de vida que llevo practicando casi 4 años y que desde que vino a verme finalizar mi primera prueba, supo que aquello también le gustaría y que tenía las cualidades necesarias para practicarlo. No hay mayor orgullo para una hermana que finalizar una prueba deportiva junto a su hermano y más aún cuando se le dibuja una sonrisa de satisfacción nada más cruzar la meta que en pocas ocasiones una tiene la oportunidad de ver. No es el circuito del Triatlón de El Prat, es lo que te provoca cuando lo preparas, te inscribes y lo compartes.

Ahora, a revisar el calendario y convencer de nuevo a mi hermano para que lo hagamos juntos.

@helarte_barry

Categorías
Mi camino al éxito

¡Yo también muevo mi cuerpo!

Los chicos de The Gate dicen que el deporte es muy importante para ser feliz y triunfar.

Y yo también lo creo así.

El único deporte que yo practico es bailar y empecé con cinco años. Bailaba flamenco y lo hice muy bien.

Pasó mucho tiempo en Venezuela con mi familia y con con mis padres y, como sabéis, llegué a Alicante y seguí bailando flamenco en una academia de San Juan con dos profesoras que se llaman Lola y Pepa, allí también hice muchas actuaciones.

Después de eso seguí bailando y cuando entré al colegio, allí bailaba flamenco y luego hice Mary Poppins y ¡hasta una jota!

Con mis amigas también hice bailes como el de Chayanne y después de eso hicimos el baile de la película Rey León.

Pasó mucho tiempo, muchos años, y me apunté a Psicoballet con Jessica, la profesora de baile, y con ella hice muchas actuaciones. Ahora, bailo en la Asociación de Síndrome de Down con mis amigos y una profesora que se llama Irene y hago muchas cosas: Zumba, merengue, bachata y salsa, tres días a la semana.

Me despido con mucho amor para todo el mundo.

¡Todos a mover el cuerpo!

Categorías
Mi camino al éxito

El descanso del guerrero

Cuando estamos inmersos en nuestro proyecto, a veces nos dejamos llevar tanto por él, que nos olvidamos de nosotros mismos.

Nos creemos que sólo hay que sufrir y trabajar, trabajar y sufrir.

Y esto es un error. A esta vida no hemos llegado a sufrir. Al llevar a cabo nuestro proyecto, tampoco. (Claro que lo pasaremos mal, pero esto no tiene que ser durante el 100% de todo nuestro trabajo).

 

Durante la creación de mi novela gráfica, si tenía espacios libres donde me permitía descansar, a veces hasta me sentía mal… Tumbarme un rato en el sofá o ver un capítulo de una serie, me hacía sentir como si perdiera el tiempo, como si mi dedicación estuviera siendo malgastada en la nada.

Y como mencionaba anteriormente, esto es un error.

Ya que el mayor potencial de nuestra idea somos nosotros mismos y tenemos que mimarnos.

Estar estresados y cansados continuamente, no ayudará a nuestro proyecto. Hará justo lo contrario, minarlo.

Así que poco a poco aprendí a gestionar mi tiempo y, sobre todo, a gestionar mi mente.

Los tips que me sirvieron (y aún me sirven) son los siguientes:

1.Identificar las horas productivas en tu jornada.

Y aprovéchalas. Hay gente que trabaja mejor de noche y otra de día, es cuestión de ir probando y ver cuáles son tus mejores horas. Yo rindo el doble a primeras horas de la mañana que a últimas de la tarde.

 

2.Silencia el ruido de tu mente.

Es muy importante tener la cabeza tranquila. El estrés es un veneno. Estando estresado lo único que haces es nada. No sirve para nada más que para entorpecer. Practica yoga, meditación, corre, grita… pero silencia ese ruido mental, para descansar bien por la noche.

 

3.Pasito a pasito.

No te agobies pensando en la maratón, alégrate de cada metro recorrido, ya que en caso contrario, ¡se te caerá el mundo encima!

 

Llegará un día que digas: “¡ostia! ¡Si ya he terminado!”

Y ala, ¡a tumbarte a la bartola!

Categorías
Mi camino al éxito

Los demás

¿Formarse o venderse?

Formación.

He conocido a gente realmente buena en un campo específico, les he visto coleccionar títulos y conocimientos como si de cromos se tratase, les he visto dar charlas delante de grandes masas… pero luego fallan en algo que, a priori, es de lo más sencillo: su relación con los demás.

Nutricionistas, entrenadores, corredores de seguros, abogados y prácticamente cualquier persona, hoy en día, tienen algo en común: el contacto directo con la gente.

Y, en gran parte, su éxito profesional dependerá de ese trato.

Estudias y eres una “máquina” para ser el mejor, inviertes muchísimas horas, dinero y dedicación, pones más empeño que nadie… pero te olvidas que para alcanzar lo más alto tienes que ganarte a las personas, tienes que llegar a ellos, si no, jamás te considerarán un referente a seguir ni alguien al que tomar en serio .

Quizá seas realmente bueno, pero no puedes vender absolutamente nada porque careces de empatía, no transmites confianza o no sabes manejarte en un mundo extremadamente competitivo donde tú eres el que debe venderse.

No puedes esperar a que nadie llegue a ti por arte de magia.

 

Marketing.

Sin embargo, también he visto a gente vender humo a raudales y hacerse con la simpatía de la gente sin tener la más remota idea sobre lo que están hablando. Poseen esa especie de don que atrae tanto a las personas que incluso las enamora. Ellos venden su producto incluso más que tú el tuyo.

En parte es injusto y en parte no lo es, la verdad es que sea como sea, así es.

 

Conclusión.

Por ello, no sirve de mucho despuntar con alguna aptitud si tenemos grandes carencias en otras. Debemos intentar no volvernos locos y buscar nuestro propio equilibrio personal y profesional, hará que resulte más fácil igualar la balanza. Somos seres con un potencial casi ilimitado: saber auto-gestionarse, marcar el tiempo de las cosas, saber utilizar nuestros puntos fuertes y, sobre todo, trabajar sobre los débiles, marcan la diferencia entre unos profesionales  y otros, entre unas personas y otras.

 

No impidas que tu éxito se vea afectado por no saber tratar con la gente, trata de trabajar en ello exactamente igual que cuando tratas de adquirir nuevos conocimientos.

Categorías
Psicologia

Sé más grande que tus dudas e incertidumbres

Todos sabemos de lo que hablamos, incluso más de lo que nos gustaría:

Ese sentimiento de que no eres lo suficientemente bueno, que no tienes lo que hay que tener para triunfar o que la siguiente etapa te queda demasiado grande…

Incluso las personas más seguras de sí mismas tienen sus momentos de duda e incertidumbre (porque son inevitables) y tienen la sensación de que dichas cuestiones ocupan todo el espacio de tu cuerpo y de tu mente.

Esta manera negativa de pensar puede venir tanto de fuentes externas como internas:

Quizás han ascendido a tu compañero antes que a ti, o tu grupo de amigos se ha ido de escapada y no te han avisado…

Puede ser que estés observando los cambios en tu alrededor de manera que te asuste lo que viene después para ti…

O puede ser mucho más profundo que eso.

Es probable que hayas crecido y vivido con una creencia errónea sobre ti mismo. Como que eres tonto, feo o una mala persona que no merece respeto o triunfo…

Independientemente de cuál de esas fuentes sea la tuya, tanto la duda como la incertidumbre pueden ser muy destructivas si no sabemos dirigirlas. Hasta pueden desembocar en sentimientos de miedo, enfado, tristeza o soledad.

¡No dejes que la negatividad te gane!

Aquí tienes algunas maneras de hacerte más grande que tus dudas y conectar con tu fuerza y tu resiliencia:

1. Aférrate a la realidad.

Los pensamientos que nos llevan a dudar de nosotros mismos normalmente no están conectados con la verdad: nos olvidamos de quiénes somos realmente. Ese tipo de pensamientos suelen venir por inseguridades o experiencias que van en contra de nuestros logros. Es cierto que no es fácil pensar en lo maravillosos que somos en ese momento de flaqueza, pero podemos prepararnos.

Hazte una tarjeta identificativa, un D.N.I. para momentos “de bajón” que te recuerde tu verdadera identidad y tus mejores capacidades:
  • Mi nombre es...
  • Vivo en...
  • Soy muy buena/o en...
  • Soy único/a y no tengo nada que temer.

2. Respira.

Tómate un momento para echarte a un lado y respirar.

Entiende que la incertidumbre es temporal y que los nervios que tienes no están ahí para hacerte daño sino para ponerte en marcha. Tu destino es sentirte preparado y seguro, la duda dura poco.

3. Escribe tus dudas.

En lugar de permitir que tus pensamientos se enrosquen en tu mente y te alboroten la cabeza…

Dedica algo de tiempo a escribir en pequeños papelitos cada una de tus dudas.

Luego, léelas en voz alta y pregúntate si esa duda te sirve o es real. Si no es así, rompe el trozo de papel y ¡tíralo! Si la respuesta es sí, piensa por qué esa duda te sirve. Este ejercicio puedes hacerlo acompañado de alguien en quien confíes, así podrán darte apoyo, honestidad y ayuda.

4. Confía en ti mismo.

Sin más, confía en ti, sencillamente confía en ti, simplemente confía en ti, porque en tu interior está esa confianza y porque está deseando que accedas a ella para superar cualquier dificultad.

 

Y sobre todo…

 

Dirige tus dudas, son tuyas y puedes controlarlas.

¡Eres más grande que ellas!

 

Categorías
Mi camino al éxito

Supporters

Solo llegarás rápido, con supporters llegarás feliz.

Mi padre, Francisco Artacho, hombre de 55 años (desde el viernes pasado), enamorado de la misma mujer desde hace 40 y con 3 hijos treintañeros (cada uno con su locura de vida): la mayor, servidora, aficionada al triatlón y a las carreras y travesías de larga distancia y con una rotura de clavícula a sus espaldas; Javi, mi hermano, dedicado en cuerpo y alma al mundo de la tele, nómada en ocasiones a causa de tal implicación y con mil aficiones para las cuales, primero se equipa y luego, si eso, las practica; y Sergio, su gemelo, un trotamundos desde hace más de 5 años que va donde el mar le reclama, es instructor de submarinismo y actualmente reside en Maldivas.

Podríamos haber elegido vidas más convencionales, más cómodas… pero entonces viviríamos a medias. Nos gusta el riesgo, sentir que abrazamos la vida con cada paso que damos y si pensamos y actuamos así es porque, si fallamos, les tenemos a ellos: a mi padre y a mi madre, que no dudan en socorrernos y en animarnos de nuevo a seguir tomando decisiones en firme.

El camino lo marcamos nosotros, ellos se quedan tras la barrera dando palmas y gritos alentadores cuando las fuerzas decaen o las dudas surgen.

Este fin de semana fueron los 100km de la TRAILWALKER y el equipo de la empresa participamos en ella. Todo perfecto aunque necesitábamos dos personas que nos acompañaran con el coche y nos abastecerían cada 10-17km para nosotros poder continuar la marcha. Mi padre no dudó en presentarse voluntario para tal papel. Es más, lo repitió en varias ocasiones, lo cual me hizo intuir que no se ofrecía para hacernos un favor, sino que realmente le hacía ilusión pasar más de 20 horas despierto, en el coche de aquí para allá, encargándose de toda la logística… Finalmente vino y junto a Sergi, mi pareja, nos ayudaron a cada paso. Una sonrisa y palabras de apoyo. Eso es lo que recibíamos con cada etapa superada. Pasaban las horas y los kilómetros y, aunque son duros si los recorres andando o corriendo, no imagino qué supone hacerlos en coche y sin dejar que la mente descanse pensando única y exclusivamente en las necesidades de los 4 marchantes, necesidades que cambiaban según el corredor y la hora.

Mientras corríamos, las fuerzas iban desvaneciendo y solo el pensamiento de saber que les iba a ver al terminar la etapa era lo que me daba aliento y ganas de seguir.

Ellos estaban ahí, sin esperar nada a cambio.

Todo fue entrega, optimismo, ánimo y 21 horas sin dormir esperando nuestra llegada. Nosotros decidíamos lo rápido que queríamos ir y los dos supporters aceptaban y apechugaban siempre sonriendo. Ellos se quedarían despiertos las horas que los corredores decidiéramos.

No hay palabras para definir un acto tan altruista y menos cuando los dos, mi padre y mi pareja, son aficionados también a correr y las ganas de echar a andar debieron reprimirlas en muchas ocasiones porque ese no era su papel ese día. Llegamos a meta a las 7AM y estaban ahí, con mi madre, incluso, que había madrugado para recibirnos. Sonreían, aplaudían, gritaban… no dejaron que el cansancio que acumulaban nos quitara el protagonismo. Éramos los 4 los que lo habíamos logrado, los que habíamos corrido 100km sin dormir… pero eran ellos los que hicieron que el camino fuera fácil, los que se prestaron a cualquier faena, los que nos recibían y nos daban apoyo físico y moral, los que no se llevarían una gloria que tampoco pedían.

Este fin de semana ha sido una muestra más de la entrega de mi padre a hacernos felices y apoyarnos tomemos las decisiones que tomemos. Caer no es malo, es imprescindible, pero es más fácil arriesgar si sabes que cuando levantes la cabeza te espera una sonrisa que te empuja a volver a intentarlo.

Gracias papá y feliz cumpleaños.

 

@helarte_barry

@helartedeltriatlon

Categorías
Mi camino al éxito

PARÍS

Yo ya os he hablado de mis sueños cumplidos de mi trabajo y de mi familia, pero también es importante tener premios cuando se trabaja mucho como yo. Así que en mis vacaciones del año pasado (porque es muy importante descansar) hice el viaje de mis sueños.

Mi deseo era ir a Paris y pude cumplirlo.

Fui a la ciudad el amor.
Nos fuimos una amiga mía, mi madre y yo, la fecha fue el día treinta y uno del mes julio hasta el día cuatro de agosto y llegamos a un hotel de lujo.
Vimos muchos sitios y hemos hecho muchas fotos.
Lo primero , fuimos a ver la torre Eiffel y me encantó mucho, después fuimos a otro sitio y era a un parque para descansar de caminar tanto. Nos fuimos a Notre Dame y hemos estado en un crucero por el río, después entramos a una iglesia y me encantó mucho y, cuando se hizo la hora de comer, fuimos a un restaurante súper chulo, luego fuimos a una terraza para tomar un té.
Al día siguiente nos fuimos al Arco del Triunfo y me fascinó mucho y por la noche fuimos a la torre Eiffel otra vez, nos subimos a la segunda planta vimos la vista de todo París y hemos bajamos a cenar, después nos fuimos al hotel para dormir.

 

Otro día, fuimos a Disneyland Paris y vi a Pluto y a Goofy que me firmaron mi libreta, luego a Minnie, que también me firmó y me hice fotos en los dos sitios.

Estuve con Mickey, me firmó y me hice fotos y luego hemos ido a la cabalgata de Frozen que me encantó mucho. Más tarde fuimos a otra cabalgata que salían todos los personajes y me fasicinó mucho y fuimos a un teatro de Star Wars que me encantó.

Otro día estuvimos en una iglesia que vi por dentro y hemos hecho muchas fotos. Más tarde fuimos a ver el Moulin Rouge y me encantó mucho y fuimos a comer hamburguesa de patata, steak tartar y queso, ¡estaba buenísimo!

Ir a París fue una oportunidad y otro sueño cumplido y estoy deseando tener vacaciones otra vez para irme de viaje a más sitios y aprender muchas cosas nuevas.

Me despido con mucho cariño y también amor.